No es ciencia ficción ni brujería, es una prueba real. Es una validadora de Renfe leyendo el abono único en tarjetas emitidas por diferentes autoridades de transporte.
La parte técnica está resuelta. Sólo falta la voluntad regional.
No es ciencia ficción ni brujería, es una prueba real. Es una validadora de Renfe leyendo el abono único en tarjetas emitidas por diferentes autoridades de transporte.
La parte técnica está resuelta. Sólo falta la voluntad regional.