Es romper con la historia oficial que nos borró.
Es decir: nosotros también estuvimos allí.
Y estamos aquí.
Con memoria, con rabia, con duelo, con orgullo.
Es romper con la historia oficial que nos borró.
Es decir: nosotros también estuvimos allí.
Y estamos aquí.
Con memoria, con rabia, con duelo, con orgullo.
A hablar en colegios, actos, entrevistas.
Lo hizo con miedo, con vergüenza, con coraje.
Para que nadie más tuviera que vivir con tanto silencio.
A hablar en colegios, actos, entrevistas.
Lo hizo con miedo, con vergüenza, con coraje.
Para que nadie más tuviera que vivir con tanto silencio.
Contaba lo que nadie había querido escuchar:
Que también se persiguió, torturó y asesinó a miles de homosexuales.
Y que, tras la guerra, fueron condenados de nuevo al olvido.
Contaba lo que nadie había querido escuchar:
Que también se persiguió, torturó y asesinó a miles de homosexuales.
Y que, tras la guerra, fueron condenados de nuevo al olvido.
Pierre rompió el silencio.
Se declaró públicamente homosexual y superviviente de un campo nazi.
Y en 1994 publicó su testimonio:
"Yo, Pierre Seel, deportado homosexual."
Pierre rompió el silencio.
Se declaró públicamente homosexual y superviviente de un campo nazi.
Y en 1994 publicó su testimonio:
"Yo, Pierre Seel, deportado homosexual."
Se casó. Tuvo hijos. Intentó "ser normal".
Pero la herida estaba abierta.
Profunda. Sucia. Innombrable.
Hasta que un día, en 1981, escuchó a un obispo francés decir en televisión:
“Los homosexuales son una amenaza para la civilización.”
Se casó. Tuvo hijos. Intentó "ser normal".
Pero la herida estaba abierta.
Profunda. Sucia. Innombrable.
Hasta que un día, en 1981, escuchó a un obispo francés decir en televisión:
“Los homosexuales son una amenaza para la civilización.”
Ni su familia, ni las autoridades, ni la sociedad francesa.
Ser homosexual seguía siendo una vergüenza. Un delito moral. Un tabú absoluto.
Ni su familia, ni las autoridades, ni la sociedad francesa.
Ser homosexual seguía siendo una vergüenza. Un delito moral. Un tabú absoluto.
Le hicieron desnudarse.
Y luego soltaron a una jauría de perros sobre él.
Pierre lo vio todo. No pudo gritar. No pudo llorar.
Solo tragarse el horror y sobrevivir.
Le hicieron desnudarse.
Y luego soltaron a una jauría de perros sobre él.
Pierre lo vio todo. No pudo gritar. No pudo llorar.
Solo tragarse el horror y sobrevivir.
Y enviado al campo de Schirmeck, donde fue obligado a usar un uniforme de prisionero sin número: los homosexuales eramos considerados "invisibles", indeseables incluso entre los prisioneros.
Y enviado al campo de Schirmeck, donde fue obligado a usar un uniforme de prisionero sin número: los homosexuales eramos considerados "invisibles", indeseables incluso entre los prisioneros.
Era solo un adolescente.
Había acudido a la policía tras un robo.
Pero en lugar de ayudarle, lo detuvieron: su nombre aparecía en una lista secreta de “homosexuales vigilados”.
Era solo un adolescente.
Había acudido a la policía tras un robo.
Pero en lugar de ayudarle, lo detuvieron: su nombre aparecía en una lista secreta de “homosexuales vigilados”.
Incluso cuando parezca imposible.
Incluso cuando cueste todo.
Lo personal es político. Ahora y siempre.
Incluso cuando parezca imposible.
Incluso cuando cueste todo.
Lo personal es político. Ahora y siempre.
Es recordar que también hubo héroes LGTBIQ+ y que su legado sigue siendo político.
Es recordar que también hubo héroes LGTBIQ+ y que su legado sigue siendo político.
Fue uno de los últimos testigos vivos del Holocausto LGTBIQ+.
Su historia no se enseña en los libros de texto.
Pero debería.
Fue uno de los últimos testigos vivos del Holocausto LGTBIQ+.
Su historia no se enseña en los libros de texto.
Pero debería.