——— 𝑓𝑎𝑛𝑡𝑎𝑠𝑦𝑣𝑒𝑟𝑠𝑒; #brᥱᥒᥒᥲ
Tuvo que controlar su sed, sobre todo por que su sed se estaba mezclando con el dolor de la >
Tuvo que controlar su sed, sobre todo por que su sed se estaba mezclando con el dolor de la >
¿Y quién no estaba enfermo en aquella ciudad plagada de suciedad y enfermedad?
— Agradezco su dinero pero no lo puedo aceptar sin un servicio y ahora mismo... no puedo ofrecerle una buena noche.
Interpretar>
¿Y quién no estaba enfermo en aquella ciudad plagada de suciedad y enfermedad?
— Agradezco su dinero pero no lo puedo aceptar sin un servicio y ahora mismo... no puedo ofrecerle una buena noche.
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— Caballero, insisto.
Empujaba la moneda hacia el moreno controlando su fuerza tanto como podía, pues los pensamientos de hundirle el metal precioso en el pecho se arremolinaban en su mente. >
— Caballero, insisto.
Empujaba la moneda hacia el moreno controlando su fuerza tanto como podía, pues los pensamientos de hundirle el metal precioso en el pecho se arremolinaban en su mente. >
Sus enguantadas manos tomaron la moneda de plata. Aquello iba a doler, pero ya estaba acostumbrada al dolor, no importaba, lo aguantaría aunque tuviera que >
Sus enguantadas manos tomaron la moneda de plata. Aquello iba a doler, pero ya estaba acostumbrada al dolor, no importaba, lo aguantaría aunque tuviera que >
Tal vez si lo engatusaba para que fuera con ella, el amo estaría orgulloso de su caza, aunque expresamente le había pedido >
Tal vez si lo engatusaba para que fuera con ella, el amo estaría orgulloso de su caza, aunque expresamente le había pedido >
— Regreso a casa de mi hermana, por favor, suélteme, se preocupará por mi.
Estaba calculando, con aquel bíceps, en la oscuridad... ¿Cuánto tiempo le llevaría partirle el brazo? >
— Regreso a casa de mi hermana, por favor, suélteme, se preocupará por mi.
Estaba calculando, con aquel bíceps, en la oscuridad... ¿Cuánto tiempo le llevaría partirle el brazo? >
— Señor, me ha sobresaltado.
Fingió como su pecho subía y bajaba del sobresalto, si estaba un poco borracho seguro conseguía engañarle, el problema es que Geneviève no había >
— Señor, me ha sobresaltado.
Fingió como su pecho subía y bajaba del sobresalto, si estaba un poco borracho seguro conseguía engañarle, el problema es que Geneviève no había >
Sus manos estaban cubiertas por unos guantes >
Sus manos estaban cubiertas por unos guantes >
Limpio.
No podía sentir la amargura de la enfermedad en sus fosas >
Limpio.
No podía sentir la amargura de la enfermedad en sus fosas >
Ya había vivido cómo esas, personas sucias e infectadas de enfermedades venéreas que querían acercarse a ella, pero esas no eran del gusto de su amo, así que con amabilidad rechazaba sus compañías.
Tomó una breve bocanada de aire, >
Ya había vivido cómo esas, personas sucias e infectadas de enfermedades venéreas que querían acercarse a ella, pero esas no eran del gusto de su amo, así que con amabilidad rechazaba sus compañías.
Tomó una breve bocanada de aire, >
Por unos breves segundos sus ojos violetas habían cruzado miradas con unos ojos fríos como el propio hielo, y casi sin poder negarse tenía a >
Por unos breves segundos sus ojos violetas habían cruzado miradas con unos ojos fríos como el propio hielo, y casi sin poder negarse tenía a >
Un sombrero cubría su cabeza y sus cabellos completando su vestimenta, un toque de elegancia y moda local.
Estaba lo suficientemente provocadora como para ser confundida con >
Un sombrero cubría su cabeza y sus cabellos completando su vestimenta, un toque de elegancia y moda local.
Estaba lo suficientemente provocadora como para ser confundida con >
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Así pues cuando Gen estuvo acomodada en una vida vampírica comenzaron las peticiones y los castigos.
Así pues cuando Gen estuvo acomodada en una vida vampírica comenzaron las peticiones y los castigos.
Jean Alexander fue introduciendo poco a poco a Gen a aquella nueva "vida" vampírica, ofreciéndole una espesa medicina roja para que sanase bien sus huesos, creándole necesidades de su ser, hasta el punto en el que Gen llegaba a
Jean Alexander fue introduciendo poco a poco a Gen a aquella nueva "vida" vampírica, ofreciéndole una espesa medicina roja para que sanase bien sus huesos, creándole necesidades de su ser, hasta el punto en el que Gen llegaba a
Cuando Gen despertó en el castillo de Jean Alexander supo que algo en ella había cambiado, todo su
Cuando Gen despertó en el castillo de Jean Alexander supo que algo en ella había cambiado, todo su
Pero entonces llegó la fatídica noche en la que Jean Alexandre Durand se fijó en ella, estuvo siguiéndola por
Pero entonces llegó la fatídica noche en la que Jean Alexandre Durand se fijó en ella, estuvo siguiéndola por