“Se siente como en casa.” Una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro. “¿Y a tí te gusta la vida de jinete?

“ se detuvo. “¿Van las cosas bien contigo?”

Tomó el papel mientras leía atentamente los títulos que se encontraban allí. Guardó el papel en uno de sus bolsillos.

“Solo faltaría uno de ellos. El último, pero si llega a estar disponible para mañana, te lo haré llegar.” Asintió mientras retrocedía para dirigirse en busca de los libros, pero »

“Dame un momento.”

Signó, aunque no tardó en desaparecer por los pasillos, en busca del libro.

« Signó rápidamente, adoptando una expresión más seria. “¿Qué estás buscando realmente?”

La mirada de Jesinia recorrió rápidamente la estancia para asegurarse de que nadie prestara atención a ellas. Deslizó la mano por la correa de la bandolera para dejarla sobre la mesa, negando.

“El título que me diste no se encuentra actualmente disponible, quizás la próxima semana pueda traerlo.” »

“Podría decirse que es todo lo opuesto a lo que podría verse en el cuadrante de jinetes.” Signó, sonriendo ligeramente. “Todo es muy tranquilo por aquí.”

“Tenemos muchos relacionados, ¿hay algo en particular qué buscas?” Preguntó a la vez que listaba en su mente una serie de libros que podrían ser de interés.

“No necesariamente, vino a buscarte hace rato.” Intentó disimular una sonrisa. “Me pregunto dónde estarías escondida o con quién, pero en otros temas tengo los libros que me pediste.”

“Y ha de ser urgente si no esperaste al carrito de mañana”. Alzó una ceja, tomándose un momento para apilar unas hojas sobre el escritorio. “¿Qué libros estás buscando?”

« donde las historias que compartamos no sean solo de lo que hemos perdido.” Intentó que el movimiento de sus manos fuera firme, creyendo que ese futuro se pudiese cumplir sin sacrificios en el futuro.

« solo de guerras y traiciones. Un mundo donde el conocimiento sea la verdadera arma, y donde la paz no sea un sueño distante, sino una realidad palpable.”

Sonrió, aunque no por mucho tiempo y se volvió hacia él nuevamente. “Quizás en ese futuro, podamos encontrarnos en un lugar »

« de imaginar.” En su rostro apareció una expresión reflexiva. “Me gustaría alcanzar el camino del adepto.”

Por un instante, sus ojos se fijaron en la pared como si pudiese visualizar algo más allá, vislumbrar ese futuro ideal.

“Quiero un lugar donde las historias que narraré no hablen »

Jesenia lo observó, sintiendo el peso de sus palabras. La sinceridad en su mirada, y por un momento, se preguntó si bajo otras circunstancias se habría unido al cuadrante de jinetes bajo su propia elección. Finalmente, apartó su mano de él para signar.

“Es un futuro difícil »