Para sorpresa de nadie, la derecha argentina, que en numerosas ocasiones construyó su identidad culta por oposición a la barbarie peronista, será la responsable de terminar de enterrar el sistema científico argentino e hipotecar el futuro del país. Notable.

Mientras tanto, en el área de interés de la vicepresidenta de la nación:

De golpe para usar la palabra fascismo te piden la VTV de la escala de abstracción de Sartori pero a participar de la cooperadora del jardín se le puede decir comunista.

Bulrrich funciona más o menos así:

1) Anuncia la captura de un terrorista en una operación conjunta con la CIA.

2) La CIA niega su participación.

3) Bullrich ahora dice que es sospechoso.

4) Se descubre que en realidad es un mecánico de Burzaco apodado el Turco.

5) El tema se olvida.

El bueno de Luigi destrabó, al menos por un momento, la infumable empatía popular hacia los millonarios y sus putas vidas de Instagram vendidas como la moral contemporánea. Por la fuerza develó la realidad: son todos una banda de hijos de mil puta; y encontró un eco que no se había hecho notar aún.

"Cristian Ritondo hoy está siendo víctima de operaciones y persecuciones por ayudarnos y colaborar"

(Javier Milei, encubridor de corruptos y narcotraficantes)

Desde hoy el presidente puede decidir la intervención de las Fuerzas Armadas en un conflicto o problema de seguridad interior. Es decir, puede militarizar la protección de Vaca Muerta, los aeropuertos y puertos, Plaza de Mayo o la CABA (como centro político y económico del país).

Si hubiese medios de difusión con redaños (sí, leíste esa palabra) le llamarían el decreto Kueider-Ritondo.