De ahí la falta de polémica. Si no hay polémica ni inquietud por el hecho que sean unos ignorantes y l*mecul*s de políticos y anunciantes, porque básicamente viven de publicidad y subvenciones, ¿Por qué preocuparse?
De ahí la falta de polémica. Si no hay polémica ni inquietud por el hecho que sean unos ignorantes y l*mecul*s de políticos y anunciantes, porque básicamente viven de publicidad y subvenciones, ¿Por qué preocuparse?