Me gustó mucho una cosa que leí en una crítica sobre cómo usando la fantasía se describe aún mejor esa época y esos personajes que con una recreación completa de los hechos.

Creo que es muy fácil criticar desde el púlpito que te da vivir de suscripciones como es su caso en bloomberg. Y también es habitual que las mayores críticas lleguen desde quienes ejercen o ejercieron investigación u opinión en medios, pero no han tenido personal a su cargo.

Me parece que es un mal muy habitual en el periodismo estadounidense. De hecho me lo crucé en los esports con ESPN, que tenía redactores cobrando seis cifras sin modelo de negocio viable, sacando noticias de dos párrafos y luego preguntándose a los dos años como era posible que les hubieran echado.

Criticarlo poniendo el nombre del autor y no el disclaimer creo que es como mínimo, de mal gusto, más que nada porque no tengo a Jason por alguien poco inteligente.

Y claro que el publirreportaje es más viejo que el andar a pie. Y si está etiquetado como publicidad no incumple ninguna ley.

Viernes a las 7:25 de la mañana