Era 1974, Lisboa, un militar le pidió un cigarrillo. Ella dijo que no tenía pero que podía darle un clavel. El hombre se lo colocó en la boca de su arma...
En 1999 la poetisa Rosa Guerreiro Días le dedicará el poema Celeste em Flor.
Era 1974, Lisboa, un militar le pidió un cigarrillo. Ella dijo que no tenía pero que podía darle un clavel. El hombre se lo colocó en la boca de su arma...
En 1999 la poetisa Rosa Guerreiro Días le dedicará el poema Celeste em Flor.