Me lo dieron mis viejos para poder ubicarme en una época en la que volvía poco a casa. Lo irónico es que me dijeron "es para que no te pierdas" y a los 3 o 4 meses yo perdí al teléfono.
Me lo dieron mis viejos para poder ubicarme en una época en la que volvía poco a casa. Lo irónico es que me dijeron "es para que no te pierdas" y a los 3 o 4 meses yo perdí al teléfono.