Habrá tantas cosas que no sepas, aunque te las contemos una y otra vez.

Un futuro sin escribir, un pasado presente y un presente que se improvisa al instante, estando sin estar...

Qué triste perderte así y qué suerte seguir teniéndote.

Y nos queda el consuelo de tenerte aquí, aunque ya te hayas ido un poco, llevándote lo que fuimos, lo que seremos contigo, quedando a tu merced para seguir siendo a tu lado, aquello que mejor te parezca que seamos.

Qué habrá en esos pasillos oscuros de tus pensamientos, en los que te pierdes y contra los que intentas luchar.
Y te aferras a ellos, los ves, los buscas y reconoces aunque ya no estén, queriendo así salir a flote en el mar de dudas que te atrapa.

Y vuelven historias del pasado a doler en presente continuo, martilleando de nuevo como cuando fueron de rabiosa actualidad. Desaparecemos en tu mente y dejamos de existir por momentos, sintiendo lo frágil que es lo que sabemos seguro, lo que creemos ser, pese a seguir estando.

Sé que no ha vendido tanto ("El Alquimista" es otra de mis opciones en el top, pero está muy trillada), pero he leído el post y "me encanta que me hagas esa pregunta". No he podido evitarlo, sorry

"El desorden de tu nombre" de Javier Marías.
Lo leí el último año de instituto, lectura voluntaria, podíamos elegir cualquier libro a condición de hacer una reseña/crítica del mismo. El profesor me felicitó por el escrito. Todos solían alabar su lectura y no profundizar. Yo me quedé a gusto

Precioso. Vaya sensibilidad, paciencia y arte

En mi primer año de instituto, en biología, vimos un tema sobre drogas y le hice un listado de componentes y daños del tabaco a mi padre. Lo guardó doblado en su bolsillo y le sirvió de apoyo para dejar de fumar. Lo supe después. No volvió atrás una vez inició el camino. Lo mejor que hizo. Ánimo!

jo, mucho ánimo 🫂

Ahí se van y se despiden sin gestos afligidos, sin el drama o la intensidad que les habríamos dado de haberlo sabido.

Es la crueldad de lo cotidiano, que te hace confiar en la quietud de lo seguro cuando estamos siempre inmersos en últimas veces y oportunidades únicas que pasan acariciándonos sin llamarnos la atención.

Y luego ves que ya pasaron, que no volverá a suceder, que fue esa la última vez y ahora te sabe a poco o lamentas no haberla exprimido como hoy lo harías.