Yo ya puestos me habría puesto Max Power.

Una pena, la verdad. Que buenos eran.

Es horrible la portada. El disco está guapo, sí.

La última canción del disco es 'Hay un enorme agujero (en Prosperidad)'. Sirva la canción de despedida la barrio que vio nacer al grupo. Se me ocurrió tras leer el manga Uzumaki, de Junji Ito. Me imaginé que había una de esas espirales en el barrio. Madrid es un agujero negro. Salid u os comerá.

A 'No me gusta (pero lo quiero)' estuvimos llamándola mucho tiempo 'la jota'. Va de una tarde en el mercado medieval de Zamora cuando Pedro quiso que le compráramos un caballo en un palo, para luego pensar que era un juguete de mierda. Estuvo dos días diciendo la dichosa frase.

Más trabajo. 'Escalada de turra' va de la brasa y el teatrillo del mundo del marketing. Nos quedó un poco heavy, aunque yo quería meter al final incluso más metal extremo, la verdad. No me dejaron.

No me había dado cuenta, pero la cara B del disco es una especie de crónica laboral. 'Todos los caminos llevan al Excel' cuenta como todo acaba en una hoja de cálculo –con las que cada vez tengo que trabajar más, por cierto–. Sobra decir que la música es un plagio de Bo Diddley, pero él robó a Cuba.

Con 'Abajo el trabajo' tuvimos bastantes problemas porque no nos salía. Al final hicimos un cambio con el que quedó mucho mejor. La letra tampoco es un prodigio de metáforas. Trabajar es una mierda. Punto.

Siempre metemos una versión en los discos. Para este dimos muchas vueltas. Yo hasta propuse hacer un tema de la mítica banda de punk pucelana Qloaqa Letal. Al final, sobre todo por insistencia de Ceci, nos quedamos con el clásico del primero disco en solitario de Rosendo: 'Corazón'. ¿Se parecen no?

Sobre 'Gente pija' no hay mucho que añadir. Estamos hartos de los pijos. Son una lacra y en Madrid es insoportable. Además hay nuevas modalidades de pijos latam que son si cabe peores, la verdad.

Quiero mudarme la hicimos antes de mudarnos a Soria, cuando aún estábamos pensando Ceci y yo qué hacer con nuestra vida. Al final no nos fuimos a un pueblo de Soria si no a la capital, aunque, bueno, en realidad nunca quisimos ir a un pueblo. Eso sí, seguimos pisando legos a diario.

No será para tanto es la última canción que hicimos y entró de rebote en el disco. Se me ocurrió al ver este rótulo en una información de la tele local de Soria sobre unas supuesta tormenta que había esa tarde pero que no iba a ser para tanto.

La letra de Mascletà se me ocurrió, lógicamente, cuando Almeida dijo que iba a hacer una mascletà en Madrid. Vaya por delante que no tengo nada en contra de las costumbres valencianas, pero era todo un poco absurdo y me imagine a Madrid ardiendo tras la explosión.

Jajajaja. Gracias, amic.