Muuuchassss ganas!!!
La metrópoli nos separa amiga :/

Porque lo efímero no era una tendencia:
era una forma de pensar y hacer que hoy apenas sobrevive entre las rendijas de la institución.
Mons invisible. 2015.bruxelles

Quizá desde cierta nostalgia de quien lleva veinte años dedicada a esto toca volver a mirar lo "efímero" no como algo que se enseña porque “mola”,sino como un modo de leer lo que se agota, lo que resiste y lo que queda fuera del marco.

Lo efímero ya no es fuga, sino fórmula.
Ya no improvisa, sino que responde a pliegosLa fagocitación institucional de esos procesos convierte lo temporal en protocolo de gestión:todo debe tener principio, fin y memoria justificativa.
Nada debe desbordar. Y lo que buscábamos era catalizae, desbordar

Las prácticas liminales se agotan antes de nacer, asfixiadas por la burocracia
una estética “efímera” que dura lo justo para la foto.Y artistas obligadas a sostener el mito de la experimentación desde la precariedad

El tiempo productivo el de la subvención, el informe, la justificación ha sustituido al tiempo del proceso.

Lo efímero era una estrategia de respuesta a lo que ocurría, a se puede hacer..
Ahora es una etiqueta que legitima la precariedad y la falta de estructura.
Se celebra su “ligereza”, pero ya no su capacidad de abrir grietas

Hoy, la palabra efímero "suena bien"
Suena a festival, a instalación temporal, a urbanismo táctico, a “lo participativo”.
Pero en esa estética del evento algo se perdió por el camino. Lo político

Maravilla de iniciativa!!! @carodelolmo.bsky.social

Habría que empezar a ampliar otro juego de ladrillazo no?

Jo los pasos de cebra son la hostia.
Esa es mi conclusión de hoy :)

La cultura no puede sobrevivir bajo un régimen de sospecha. Cuando el modelo de gestión prioriza la trampa burocrática sobre el acompañamiento, lo que se destruye no es solo la confianza: es el derecho colectivo a imaginar, crear y pertenecer.

El.modelo de gestión cultural del Ayto de Madrid modelo se basa en la sospecha, la fiscalización execesiva a las independientes y una falta de diálogo. No cuida el tejido cultural: lo erosiona. La cultura no se administra como una empresa, se cultiva como un ecosistema.

Cuando la burocracia se convierte en filtro excluyente, deja de ser garantía y pasa a ser castigo. La tecnificación de los procesos culturales expulsa a quienes trabajan desde lo independiente, lo experimental o lo comunitario. #Cultura #DerechoACrear #Madrid