Dios mío, qué harta estoy de todo. Del calor, del fascismo, de ser pobre, de las putas ratas especuladoras y rentistas, de la izquierda, de la derecha, de no tener dinero ni para morirme en condiciones, de las monsergas, de tener que tragarme un genocidio en directo, de la OTAN. Qué harta.

Todo esto suele terminar con alguien llamándome ceniza, aguafiestas o quintacolumnista de la derecha porque vendiendo esperanza y luces de colores siempre se puede trincar algún carguito en algún partidito de izquierdas que dentro de seis meses ni siquiera existirá.

Las cosas están mal y se van a poner supermal y ojalá me equivoque en esto y sea el estrés postraumático el que habla a través de mi teclado, pero yo ya no tengo el cuerpo para otro Gobierno del PP, y menos si ahora van a ser los lameculos oficiales de Trump. Tengo muchísimo que perder.

"Dejarse arrastrar por el derrotismo no hace sino darle alas al fascismo". Perdón por sentirme profundamente alarmada por el cambio climático, la burbuja inmobiliaria y el avance imparable de la ultraderecha en todo occidente, intentaré sonreír más aunque solo tenga arroz para comer.

"¡Proyectos que ilusionen!". El único partido que nos separa del fascismo está conformado por una cuadrilla de corruptos puteros neoliberales.

"¡No se pueden proponer solo cosas a la contra!". Se van a cargar el Estado del bienestar para financiarle los genocidios a EEUU y sus satélites.

Nunca puedes fiarte de la palabra de una empresa, me temo. Mucho ánimo.

Para sorpresa de nadie, aún no ha llegado y el seguimiento sigue atascado en el mismo paso.

Que a tope con el servicio de mensajería de nuestro país, pero a cada minuto que pasa me pongo más nervioso y lleva ya tres días atascado en el mismo punto del proceso (compruebo el seguimiento cada 5 minutos casi).

La IA generativa es la nueva “pulsera del equilibrio” que evita que te caigas. Es el reiki aún más subidito. Es esa empresa con la que ganarás millones si convences a otros 3 para entrar. Persigue el mismo perfil, el de persona que te sonríe y dice: “Esto es mejor que tú, y te lo enseño yo”.