Es un personaje de José Mota comiéndose un chichi.

Siempre he pensado que coger a Alvise y a Abascal, ponerles una chilaba y soltarlos en algún pueblucho de la «América profunda», al lado del cuartel del ICE, daría para echarse unas risas.

Yo lo tengo bloqueado. Algo habrá hecho.

A mí, las tiendas que no me permiten rechazar todas las puñeteras cookies de forma sencilla, no me ven el pelo.

Delicioso y fácil. No solo me ha encantao, sino que además mi pequeña ha repetido. ¡Ha repetido legumbres! ¡Chupate esa, Arguiñano!

Otro gilipollas pasado de cosas químicas.

Tarde y mal.

En kiluba canté yo el otro día con mi clase de coro del conservatorio. 1º de elemental. Siete años tienen todos menos otro y yo.

No son mas que mafiosos viendo peligrar su fuente de ingresos.