Mis contraseñas están todas en ese teléfono. Me quedé sin acceso.
Mis contraseñas están todas en ese teléfono. Me quedé sin acceso.
Y así de vulnerable me dejó. Desnudo. Desprovisto. O así se llega a sentir cuando pierdes esa extremidad virtual de la que nos hemos tanto acostumbrado.
Y así de vulnerable me dejó. Desnudo. Desprovisto. O así se llega a sentir cuando pierdes esa extremidad virtual de la que nos hemos tanto acostumbrado.