La única razón que explica ésta delirante editorial de Tenembaum es su bronca por haberse perdido la posibilidad de acusarla de desalmada si efectivamente CFK hubiera dicho de Lanata, el mismísimo día de su fallecimiento, ésto que él reclama. Si habla es porque habla, si calla es porque calla.

Nuestros republicanos de cartón. Es mucho lo que hizo el periodismo, incluido ese sentido común que muchos llaman Corea del Centro, para que esta declaración delirante parezca coherente.

Tal vez la realidad sea bastante mas triste que la que describe Horacio y sean muchos, demasiados, los que lo han elegido por verse representados en esos mensajes de odio.

Cómo es que se ha normalizado que los dentistas tengan estos aparatitos en sus consultorios?