Me pregunto seriamente qué sinapsis se produce en el cerebro humano para que, a pesar de nuestra pasión por lo intrincado y opulento, luego nos encanten las formas más esquemáticas posibles.

Se ha restaurado La muerte de Sardanápalo de Eugène Delacroix y parece otro cuadro casi. Así se entiende más que el pintor francés se considere el mayor exponente del color en su país. Los detalles de la pintura también se quedan atrás.

Me parece una colaboración acertadísima la de Pokémon y el Museo Van Gogh de Amsterdam. Una manera diferente con la que relacionarse con las obras de un Van Gogh que amaba las estampas japonesas o ukiyo-e. Además de que está Pikachu por ahí para hacerte tour.