Mil gracias como siempre! 🥰❤️

🐈‍⬛ Más #Raven en @elgatoyeldado.bsky.social con un nuevo capítulo del 'Seis de cuervos y tres de gatos', un relato original de Mel que es puro ambiente gótico.

Uuuh!! Como mola!! Me encanta la historia y el cómo ha evolucionado a lo que es ahora!!

Una ciudad respira, recuerda y cambia. Sentir que pueden influir en ella es lo que la convierte en una ciudad que tus jugadores no olvidarán.
Para terminar, os preguntamos, ¿Cuál es la ciudad más original que has creado o visitado en partida? Contadnos! 😊

Y lo más importante: deja que la ciudad responda a las acciones de los jugadores.
Si ayudaron a un mercader, que su tienda crezca, tengan descuentos, la gente de la zona sea más amable...
Si causaron un incendio, que la zona cambie, la gente les tenga miedo, rencor...
La ciudad debe recordar.

Vuelvo a insistir en prestarle atención a lo que se siente, pero esta vez de otra manera. Por ejemplo: “Al cruzar la puerta, la gente os mira con una mezcla de esperanza y miedo. Saben que si estáis ahí es porque algo está por pasar.” Eso crea una atmósfera y puede que un hilo narrativo!

Añade algún conflicto interno. Por supuesto, siempre hay pueblos en los que no pase nada, pero de vez en cuando... No tiene que ser de guerra o politiqueo. A veces el conflicto es social, religioso o incluso mágico. Por ejemplo: la ciudad prohíbe los espejos, la gente teme a las sombras. Esas cosas!

Los mapas están muy bien pero yo recomiendo empezar por describir las sensaciones:
¿La ciudad huele a incienso? Quizá es sumamente religiosa. ¿O huele a mar con podredumbre? ¿O quizá a pan recién hecho y aceite de armas?
Los sentidos nos sitúan rápidamente en los lugares y son muy versátiles 😊