Antes de concluir, quiero resaltar el editor de personajes, donde sí creo que Bioware ha dejado claramente su mejor editor hasta la fecha. Muy completo, intuitivo y adecuado.

En resumen, Veilguard se queda muy lejos de la mitad de camino de ser un buen Dragon Age. Como juego es disfrutable, pues tiene un sistema de combate de acción bien implementado, pero acaba siendo repetitivo. Si no vas con altas expectativas y el mensaje politico no te echa atrás, es entretenido.

En anteriores entregas, las decisiones eran difíciles, duras. Sabias que podías perder a un compañero fiel y se iba a notar. Que un pueblo iba a sufrir a costa de otro. Aquí no es algo que se note, pues parece que el objetivo es siempre quedar bien. Eso sí, el Lore que implementa es muy interesante.

Hoy por hoy, este tipo de mensajes generan odio, sobre todo en Internet, ya que al final se ha conseguido el efecto contrario del buscado. Personajes como Taash fueron mal recibidos, pues veníamos de un mundo serio, con vitales decisiones y personajes redondos. Ahora eran caricaturas políticas.

El problema aquí es que los juegos anteriores tanto en esta saga como en Mass Effect, de Bioware, ya daban ese mensaje sin forzar nada y dentro de la narrativa del juego. Además, en otros juegos es un mensaje que pega por la construcción de personajes, no se fuerza ni obliga al jugador, se explica.

Vemos casos de tipologias de accesorios o la falta de ciertas construcciones de historias y personajes que evidencian esto. A eso hay que añadir el importante y claro mensaje político del juego, donde solo se da pie a las elecciones que ofrecen, sin pensar.

En este viaje, harás alianzas poderosas con la humanidad: elfos, enanos, magos, guardas grises... Todos se unirán para que el mundo conocido no desapareciese.

Los antiguos Dioses Elgar'nan y Ghilan'nain se podrán en medio de tu camino, pues querrán volver a gobernar como antes de ser liberados.

Solas quiere destar el Velo para restaurar el mundo elfico con el que él acabó separando el mundo mortal del de los espíritus. Tú, como Rook deberás evitar que haga esto reclutando a lo que se conocerá la Guardia de Velo y donde enfrentarás a los Viejos Dioses elficos que Solas encerró en el Velo.

Concretamente, desde la última expansión, donde te dejan caer lo que Solas iba a provocar por el horror que había visto de sus actos en el pasado tras despertar en la 9:40 del Dragón.

En esta situación, se desarrolla lo que va a ocurrir en este juego.

Ya solo con eso, captaron mi interés. Al llegar al juego, te presentan a Varric y Harding. Personajes de la saga que aparecen desde Dragon Age 2 e Inquisition respectivamente. Son dos personajes queridos, más el primero, evidentemente; y te cuentan los estragos provenientes del final de Inquisition

Con Veilguard, a pesar de los muy malos presagios, iba con expectativas, pues se iban a ver lugares que solo antes se veían en cómics y libros y que en los juegos solo se nombraban en los códices y libros como algo onírico; lo podías imaginar, pero no ver. Eso iba a cambiar.

Dragon Age The Veilguard fue un evento. Así, para empezar. Yo soy fan de la saga. Como cualquiera que lo jugase, Origins me maravilló, pero es cierto que la saga va con la flecha para abajo a partir del 2. Igualmente, siguen pareciéndome buenos y entretenidos juegos.

Voy a empezar a hacer hilos con las impresiones de los juegos que me voy pasando. Voy a empezar con los que me he ido pasando a lo largo de este año. El primero fue #DragonAgeTheVeilguard.

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